Para mí son rojas, si rojo navideños con toques dorados. Me encanta los arboles navideños con su bolas y lazos rojos, el porta de belén con sus luces rojas. Las mesas con su mantel rojo y así hasta el infinitoPero sobre todo me encanta vestir a los pequeños de la casa de rojo. Ellos están monos con todo eso es verdad, pero quién se resiste a vestirlos con cierto años aire navideño, o a disfrazarlos.
Los trajes de papá o mamá Noël ya son un clásico, junto con los de angelitos o niño Jesús. Y cada año nos volvemos más creativos y atrevidos, y nuestros niños se vuelven bolas de colores, estrellas…etc.
Hay muchas navidades y de muchos colores, pero todas deben estar llenas de amor y felicidad.
Por eso te deseamos una «feliz Navidad»